Cuando los síntomas son ligeros y te sientes bien ejercitando, continua. Pero si te sientes mal a medida que practicas la actividad física baja el ritmo o simplemente para y vete a descansar.
En este caso tu cuerpo te esta pidiendo reposo y una buena alimentación para recuperar las energías.
Especialmente nadie con fiebre debe ejercitarse, se corre el riesgo de desidratarte.
Especialmente nadie con fiebre debe ejercitarse, se corre el riesgo de desidratarte.
Préstale atención a tu cuerpo. Si aprendes a distinguir las señales que te envía podrás detenerte cuando sea necesario y atender cualquier lesión rápidamente, para poder regresar lo antes posible a la rutina de ejercicios y mantener el estilo de vida sano que has elegido.
Hugo Viano